sábado, septiembre 13, 2008

Septiembre , una mirada diferente, 35 años después


Con grandes dificultades para posicionar el tema de la memoria histórica, en medio de un gobierno dirigido por una mujer socialista que está enfrentada a múltiples frentes de crisis, este septiembre ha sido diferente a años anteriores, talvez, en parte, porque los protagonistas de los trágicos episodios de 35 años atrás, ya han envuelto la historia en el celofán de la leyenda y no hay voluntad política para escarbar en ella porque les resulta menos incómoda la nostalgia que la autocrítica.

Cuando se despide a protagonistas de esa historia de 40 años atrás, como lo fueran Juan Hamilton Depassier y Carmen Lazo, uno debe asumir que la solución biológica funcionará y que pronto, hasta los más imberbes universitarios y dirigentes de esa época pasaremos a engrosar las cohortes de la tercera edad y habrá muchos que encallarán en los arrecifes de la depresión profunda, al darse cuenta de que su tiempo pasó y que las oportunidades históricas se dan una sola vez y que quienes se las farrean deben soportar el juicio o el repudio de las nuevas generaciones o, lo que es peor, el pase sin pena ni gloria a los anaqueles del olvido oficial.

Por ello, talvez, la clase política sea tan sorda a las demandas que afloran por doquier y se enfrasque en la inmediatez de las próximas elecciones, sin abrir compuertas a los independientes, tratando de seguir controlándolo todo, temerosa de aquel electorado potencial que anda orbitando el sistema, ése que no se integra, no se inscribe o se abstiene, quizás por una reacción nihilista o a lo mejor por mera comodidad, en un rechazo tácito a la forma de hacer política o en un escapismo que significa resignar su libertad, siendo pasivos frente a lo social.

En este septiembre los problemas presentes que enfrenta nuestro país y el mundo entero, no han dejado espacio para etapas de reflexión. Además, cualquier acto en tal sentido se ha convertido de hecho en un acto proselitista, de campaña, por la proximidad de las elecciones municipales. Las luchas internas por alcanzar nominaciones y el reparto de puestos para la ingeniería electoral son preocupaciones principales de los políticos y mirar atrás les resultaría a todos un ejercicio penoso, donde la prueba de la consecuencia tumbaría a una gran mayoría.

Farandula sin respeto con la Memoria Histórica.

Resulta penoso que la sociedad mediática haga jugar a la gente eligiendo por mensajería de texto al chileno ejemplar. Qué absurdo cuadro es ver como en una candidatura a reina manosear los nombres de Arturo Prat, Salvador Allende, el Padre Hurtado o José Miguel Carrera. Y es una vergüenza mayor que muchos pisen el palito y que no entiendan que están siendo manipulados para un pingüe negocio de las telefónicas que ganan millonadas por esos mensajes de texto.

Es absurdo que se quiera hacer competir a personajes que son, cada cual en su tiempo, espacio y circunstancias, personas de honor y compromiso. Cuando la farándula se instala con tal liviandad en un canal oficial como TVN, realmente enerva el grado de manipulación que se mantiene sobre la ciudadanía, montando o desmontando imágenes, "a golpe de mensajes de texto", que son el negocio de esos oligopolios que nos venden tales servicios.

Energía contra el Narcotráfico

Así las cosas en este septiembre, ya hemos cruzado el temido once y se ha constatado que el caos no lo provocan fuerzas ideológicamente contrarias al sistema, sino que son el lumpem y el anarquismo urbano los que buscan robar y tomar posesión de esos bienes que les son lejanos, que aspiran obtener y lo hacen saqueando, ligados al fenómeno criminal del narcotráfico que probablemente les financia, organizando asonadas nocturnas, armados en contra de la comunidad, sin otro norte que la destrucción y el acceso a lo que sea, para financiar sus vicios.

Ello se expresó una vez más como vandalismo organizado, en situaciones que nada tienen que ver con las confrontaciones ideológicas de 40 años atrás. Esa realidad emergente, de un enemigo sórdido que socava a nuestras comunidades, es dramática y urgente y debiera motivar a todos los sectores a cerrar filas, con visión de Estado, para recuperar esos espacios arrebatados a la comunidad por las mafias de la droga y, en general, por la delincuencia que la circunda.

Si se requiere para ello modificar el actual sistema judicial garantista que, por lo visto no funciona como freno a la delincuencia, yo sería partidario de cambiarlo, como también considero que debería reimplantarse la pena de muerte para aquellos homicidios que por su ensañamiento y alevosía han remecido a la sociedad.

En ese sentido, agotar los esfuerzos para enfrentar los nuevos enemigos del sistema democrático, pasa a ser un tema de fondo para la agenda pública y ello está por encima del clientelismo barato que pretenden seguir practicando muchos actores políticos.

Chile, 35 años después requiere demostrar respeto a la Memoria histórica, pero, por sobre todo , un compromiso coherente de los actores públicos y privados para mirar el futuro y como acción de Estado, erradicar la droga de nuestro país. Si ello requiere reformas de fondo, si hubiese que dictar estados excepcionales para erradicar las mafias, hagámoslo a tiempo. No nos empantanemos en disquisiciones ideológicas al acometer esos cambios. Quien plantee este nivel de compromiso tendrá, sin dudas, una amplia adhesión ciudadana.

Iquique, 13 de septiembre de 2008.


Una mirada libre a nuestro entorno

1 comentario:

Unknown dijo...

Estimado Hernán
Supongo que no hay problema en reproducir tus columnas en el ahora periódico Granvalparaiso.cl.

Cordiales saludos.
Raúl Gutiérrez