domingo, agosto 16, 2009

Reforma Tributaria: un debate imprescindible


Pese a la reticencia de Eduardo Frei de proponer una reforma tributaria, argumentando que no sería conveniente hacerlo en tiempos de crisis, tanto Sebastián Piñera como Marco Enríquez Ominami han planteado la necesidad de modificar la actual estructura impositiva en caso de salir elegidos. Sebastián Piñera ha argumentado querer bajar los impuestos a las personas, pero no tocará los impuestos directos a las empresas ni menos fortalecerá la fiscalización sobre ellas. Mantener la estabilidad de las reglas del juego es una explicación teórica, pero en el trasfondo está el interés de blindar la actividad de grandes conglomerados de la intrusión fiscalizadora del Estado. Marco Enríquez Ominami ha planteado subir el royalty a la minería a un 8% y subir los impuestos al tabaco y los alcoholes, de manera de lograr mayores ingresos que permitan seguir con el nivel de gasto social que ha alcanzado el actual gobierno.
Hechos de la causa
El sistema económico chileno ha provocado una mala distribución del ingreso y una mayor brecha que marca la concentración de la riqueza. Tanto las reglas establecidas para atraer inversión extranjera directa, como las que regulan los mercados de capitales, otorgan condiciones privilegiadas a las grandes empresas internacionales. El sistema de concesiones, por ejemplo, arrastra contratos leoninos que son garantistas para proteger los derechos de los privados y dejan limitadas atribuciones para la fiscalización que el Estado debe ejercer sobre dichos contratistas o concesionarios. Estas reglas del juego ameritan una revisión de fondo para que el sistema de concesiones se regionalice, descentralizando su manejo, premitiendo que en los espacios locales se puedan implementar proyectos en concesión, con transparencia y control de los usuarios, es decir de la comunidad. Lo real es que el Estado tiene pocas atribuciones porque ellas le han sido negadas por un sistema neoliberal. En el ámbito tributario , por ejemplo, los organismos fiscalizadores de la Hacienda Pública, como SII y Aduanas no tienen capacidad para acceder a las cuentas bancarias y conocer el movimiento financiero que refleja los negocios de los operadores. El secreto bancario ha sido un obstáculo principal para reducir la evasión y ha sido planteado a Chile por la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) como un requisito para la pertenencia de nuestro país en estas ligas mayores de la economía mundial.

Las plataformas programáticas que ofrecerán los candidatos

Una bandera que ha empujado la Presidenta Bachelet a través de su Ministro Andrés Velasco y respecto a lo cual se habría esperado un planteamiento diferenciador y comprometido del Candidato oficialista, pero el tema se ha tocado sin gran convicción, lo que ha molestado a los aliados del PPD que quisieran que Frei fuese más categórico en incluir estas reformas de fondo en su plataforma progrmática.


Este tema de fondo en cuanto a políticas públicas es parte del rediseño país de su relación con los operadores privados, para que se preserve el interés nacional y se erradiquen las malas prácticas del pasado.

Por lo tanto, para afrontar un mayor gasto social, focalizándolo en la clase media y las Pymes, necesariamente tendría que incrementar la recaudaciòn fiscal y ello implicaría corregir la escala de los impuestos directos, que es hoy regresiva, fijando mayores impuestos a ciertos productos o exceptuando a otros, como los libros.

La convicción de que no se puede eludir esta discusión, ya que ella se ubica en el meollo de lo que queremos definir como proyecto país, personeros de la Concertación como Guido Girardi, en calidad de Vicepresidente del PPD, forzó al Comando de Frei a plantearse recogiendo esta plataforma progresista, lo cual generó una contradicción seria por las declaraciones conservadoras del candidato sobre la materia.

La corrección del modelo heredado que ha fracasado a nivel mundial, es uno de los objetivos que están en la palestra y marcarán la diferencia entre progresismo y conservadurismo. Se trata de impulsar una mayor equidad tributaria y dotar al Estado de facultades y herramientas legales que permitan identificar operaciones ilícitas, propias de paraísos fiscales que generan áreas grises que permiten el lavado de activos, un delito al cual confluyen diferentes delitos transnacionales.



Sie
ndo este un tema diferenciador de las candidaturas en carrera, el debate programático y las comparaciones de propuestas serán clave y nadie podrá restarse al esperado debate de los candidatos presidenciales.

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Atacama, 15 de agosto de 2009







Una mirada libre a nuestro entorno

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