De regreso a Chile debo redundar en los análisis que pude realizar desde España, donde se ha vivido en los últimos dos meses , al igual que en nuestro país, un paro importante de los empresarios del transporte de cargas, gremio con un gran peso político histórico, que ha salido a las carreteras a protestar por el alza de los combustibles. Conjuntamente se ha hecho sentir la caída de los mercados inmobiliarios y la detente de la contrucción. Cuando hay que apretarse el cinturón las personas dejan de comer postres y también dejan de viajar y si un país vive de ello, hay que poner manos a la obra y reacccionar a tiempo.
Pude apreciar y seguir las noticias europeas, viendo como Zapatero, Jefe del Gobierno español, se debatía entre su porfía y los eufemismos para negar que hubiera crisis. Cuando se dio cuenta, se había gastado el 80% del superavit fiscal, tenía más ministerios, más cargos de exclusiva confianza y las medidas que tomó fueron retóricas. La inflación se empina sobre el 6% en su país.
Chile está en una posición más sólida en materia de arcas fiscales y se debe cuidar que no se eche mano con visión coyuntural de esas reservas. Lo más sensato es lo que le leí a Sergio Bitar y que me gustaría que se constituyera en política pública efectiva: que el Estado recupere su rol de inversionista y ejecutor directo de proyectos, saliendo de la trampa de la subsidiaridad que impide que se actúe con rapidez y voluntad política en cuestiones claves, como puede serlo la generación de energías renovables, alternativas a las hidro y termoeléctricas.
Pero para hacer tortillas hay que romper huevos y se requiere un equipo ministerial que de el paso al frente y comience a canalizar recursos a megaproyectos públicos que sean proritarios, tales como podría serlo la instalación de grandes estaciones de generación de energía solar en el desierto de Atacama.
A propósito de lo mismo - y trayendo a colación algo que vi en la región de Galicia, España- una experiencia exitosa con un balance ambiental excelente ha sido un proyecto de energías renovables en esa región de Galicia, donde se ha instalado un gigantesco proyecto de energía eólica en una alianza estratégica con las empresas ganaderas y lecheras de esa región, quienes han permitido que coexistan en el territorio los dos proyectos, convirtiéndose los tambos lecheros en los consumidores de la energía limpia que les proveerá el proyecto eólico, con el agregado financiero de suscribir esos usuarios títulos del mismo, con lo cual pasan a ser socios accionistas que hacen suyo el proyecto energético. Dicho de otra forma, se construye una ingeniería financiera asociativa, público-privada, de base descentralizada regional, que permite mejorar los costos y reactivar la industria lechera de Galicia, que proveerá a través de este proyecto el 10% de la leche que consume España. Algo similar me tocó vivir en un proyecto que se instaló en Barranquilla, Colombia, para la gestión de los servicios sanitarios de Agua, Aseo y Alcantarillado, que vendió acciones a los usuarios que tenían el derecho de controlar la transparencia de la gestión de la empresa municipal.
Si trasladásemos la experiencia asociativa, descentralizadora, cooperativa a Chile para hacer, por ejemplo, lo mismo en la Región de Atacama, bien prodríamos contruir un gran acuerdo entre proyectos mineros, agrícolas, ictícolas y el proyecto de inversión en energía solar y eólica que pudiera dirigir y ejecutar el Estado a través de Obras Públicas o del organismo que se cree al efecto.
Pienso que en este tipo de acciones debería concentrar los esfuerzos el gobierno nacional. Se necesita capacidad de imaginar y de actuar con audacia. Se debe dimensionar proyectos con criterios de Estado, con convocatorias suprapartidarias para no enturbiar la gestión con la política coyuntural. Acá no se trata de seguir con más de lo mismo. Acá se requiere Gestión con mayúsculas y eso significa que se debe dar poder a las regiones, a las ARDP (Agencias Regionales de Desarrollo Productivo) , para armar y resolver sus proyectos, recurriendo de manera fluida a los fondos que se ha guardado debajo del colchón y que es el momento de bien invertir.
La tentación populista puede ser repartir plata en subsidios, en el despilfarro que hizo Zapatero de crear más burocracia pública para mantener a más gente en el empleo. Pero ese camino es peligrosísimo pues puede hacer que se evaporen los ahorros estratégicos del Estado. Por ello, lo que se requiere es apoyarse en las regiones, generar rápidamente, con el concepto de una Emergencia Económica, una lista corta de mega proyectos que apunten a lo medular de la crisis y ello es la energía, la mejor gestión del agua.
Las tecnologías están y en el Estado también están los recursos humanos que las pueden instalar y poner en marcha. Si se configuran dede la ingeniería financiera acciones no oligopólicas sino asociativas, cooperativas por la vía de la titularización que he explicado, se podría lograr un impulso nacional que podría revertir el círculo vicioso de bajo crecimiento más inflación, con el desarrollo de los proyectos que Chile necesita y que podrían ser el punto de inflexión para alcanzar un desarrollo y no caer en la mediocridad y riesgos de una sociedad centralizada que pauperiza a su clase media día a día.
La crisis mundial contiene muchas otras variables que sería largo comentar. Pero de diagnósticos habrá papeleros llenos, y de lo que se trata es de identificar, con sentido de oportunidad y criterios de Estado, soluciones imaginativas, que sean impulsadas con audacia y voluntad política, que es lo que necesita Chile. La Presidenta Bachelet mantiene una reserva personal de confianza y debiera invertirla pronto en este sentido.
Una mirada libre a nuestro entorno
MENSUALMENTE
Cuando las computadoras nos agobian,
intervienen nuestro teléfono,
nos niegan un vaso de agua,
o nos condenan
al brasero y las velas,
me congratulo de poder mostrarte
mi penúltimo verso
y prodigarte, pese a todo,
mil noches de ensueño,
mientras vamos delineando,
espalda con espalda, beso a beso,
la útil estrategia, la locura,
que nos permita, mensualmente,
bogar entre arrecifes monopólicos
y llegar con nuestra tribu,
hidalgamente,
a un nuevo y glorioso
fin de mes.
Eroscidio. Amática contra el Desamor, 1988.
Cuando las computadoras nos agobian,
intervienen nuestro teléfono,
nos niegan un vaso de agua,
o nos condenan
al brasero y las velas,
me congratulo de poder mostrarte
mi penúltimo verso
y prodigarte, pese a todo,
mil noches de ensueño,
mientras vamos delineando,
espalda con espalda, beso a beso,
la útil estrategia, la locura,
que nos permita, mensualmente,
bogar entre arrecifes monopólicos
y llegar con nuestra tribu,
hidalgamente,
a un nuevo y glorioso
fin de mes.
Eroscidio. Amática contra el Desamor, 1988.
1 comentario:
Voy a empezar dando un ejemplo de la inteligencia humana: Joseph Cugnot inventor del auto a vapor 1770.
Si en esos años fueron capaces de crear un vehiculo que funcionara a vapor... ¿ Como en el siglo XXI no podemos hacer lo mismo y mucho mejor ?
Yo creo que la tecnología esta, como para eso y aun mucho mas, lo que pasa que el asunto se desvía por otras causas, que es el PODER ECONÓMICO.
El poder que implica el mover Billones de Dólares en combustible, es mucho mas rentable que ir a favor de la ecología.
¿ Por que si podemos crear autos solares, eléctricos , aun las grandes Compañías automotoras no los generan en serie ?
Es lamentable ver como los Poderes Ocultos son los que mueven los hilos de la mayoría de las Compañías Transnacionales, para beneficio propio.
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