martes, mayo 02, 2006

Soledad Alvear y su propuesta de cambio

Triunfadora en las internas de la DC, la Senadora Soledad Alvear comienza a marcar nuevos rumbos en el espectro demócrata cristiano: una nueva forma de hacer política.
Chile de verdad necesita un estilo ético y transparente para recuperar la confianza en los representantes democráticos. Por eso, esta propuesta será bienvenida en todo el mundo progresista.
El domingo 30 de Abril se produjo un sólido respaldo a Soledad Alvear, sobre todo por haber rescatado de las cúpulas del Partido la soberanía popular, el derecho de cada militante a elegir su Junta Nacional por sufragio directo. Un proceso que ha dejado heridas, pero que abre una enorme oportunidad a la DC para reenfocar su pensamiento social, alejándolo de la farándula liviana en que se han movido muchos políticos y generando, a través de un Congreso Nacional, una reflexión de futuro, que pasa por recoger los desafíos que a la conciencia humanista cristiana deja el sistema injusto en que hoy se mueve la sociedad chilena.

Cómo repensar el rol de un Estado profesionalizado, probo, capaz de impulsar sin corruptelas la complementación con los privados. Cómo regular en la sociedad el contrato laboral, en qué medida flexibilizar y en qué otra proteger a los más débiles, los trabajadores, con una fiscalización efectiva y honesta. Cómo asumir la incorporación de la clase media, las pequeñas y medianas empresas, los profesionales jóvenes, al sistema competitivo. Cómo darle valores a la vida en sociedad, cómo fortalecer la familia, cómo educar con igualdad de oportunidades, cómo recuperar el tejido social fragmentado por el individualismo y el miedo.

Son muchas las variables para reflexionar en un coloquio doctrinario. ¿En qué medida cambiarán las conductas de tribu, de clanes, de familias dentro de la DC para que pueda fluir la energía de un pensamiento de recuperación doctrinaria y de visión concordante con los tiempos actuales?

Es lo que queda como tarea y Soledad Alvear lo sabe. Espero que su planteamiento sea profundo y que no sea un simple cambio de look para la competencia partidaria. Eso sería lamentable y suicida para un partido que se ha desperfilado en un juego político sin ideas y de administración de un modelo que no le es propio.
¿Pragmatismo o rescate doctrinario? Esa es la cuestión.


Una mirada libre a nuestro entorno

No hay comentarios.: